Una temporada agonizante
Oscar Huete
Faltando alrededor de un mes de actividad en las Grandes Ligas, hay un mal olor entre la calle 161 y la avenida River y no es para menos, los multi millonarios Yankees de New York estan agonizantes y dando sus últimos suspiros en esta temporada 2008.
Septiembre es el ultimo mes de actividad y las cosas no se miran tan fáciles para los dirigidos por Joe Giraldi quien contra viento y marea ha logrado mantenerse en su puesto pese a las constantes críticas de los hijos del jefe el Sr. Hank Steinbrenner y su hermano Harold.
Y es que desde el inicio todo marcho mal, Jorge Posada, el eje central de la columna vertebral de los Mulos de Manhattan fue colocado por primera vez en la lista de lesionados y dos dias mas tarde le harían compañía el señor Alex Rodríguez y el lanzador Phil Hughes, al finalizar el mes de abril el equipo ocupaba el penúltimo lugar con record de 14 ganados y 15 perdidos a tres juegos de distancias del líder los Medias Rojas de Boston.
Las lesiones continuaron en el mes de mayo con el lanzador Ian Kennedy y el jugador de cuadro Wilson Betemit, pese a que a finales del mes A-Rod fue activado, el equipo registraba record de 28 y 27 pero un poco mas largo del primer puesto, a 5.5 juegos de distancia de los nuevos lideres el equipo de los Rays de Tampa.
Con Posada en las listas de incapacitados los fanáticos pensaban que era suficiente pero lo que menos se esperaban, que tres columnas más se derrumbaran en el mes de junio, esta vez les toco al lanzador Chien-Ming Wang quien se lesiono su pie derecho en los juegos inter-ligas, al Japonés Hideki Matsui y al jardinero central Johnny Damon.
Al concluir el mes de junio las aspiraciones fueron positivas con un Joba Chamberlain ganando juegos y abanicando a cualquier bateador que se pusiera enfrente, un José Molina desempeñándose súper bien en el manejo de los lanzadores, mas los regresos de Rodríguez y la incorporación de Posada se logro finalizar con record positivo de 44 y 39 a una distancia de 6.5 partidos del equipo sorpresa Tampa.
Llego el momento del receso por las actividades del juego de las estrellas y todo era algarabía en los terrenos del monumental Yankee Stadium, la ovación de los miles de fanáticos previos al juego a Joe Giraldi llego como un espaldarazo de aliento cuando mas lo necesitaba.
Al cierre del mes de julio aun existía una pequeña luz, que iluminaba el largo trayecto de subir a la cima del Montes Everest, con 59 y 49 se podía coquetear con la idea de avanzar a los play off , pero con lo que nadie contaba era que los muchachos de Tampa no se doblegarían fácilmente.
Llego la época de cambios y los Yankees firmaron a Richie Sexson dejado en libertad por los Marineros de Seattle por su bajo rendimiento, acción que repetirían los Mulos mas adelante, tambien obtuvieron a Xavier Nady y al pitcher Dámaso Marte de los Piratas de Pittsburg por jugadores de liga menor.
Los miles de fanáticos llenaban las graderías con el único propósito de alentar a sus alicaídos Bombarderos del Bronk, pero esto de nada servia fueron sumando derrotas tras derrotas las cuales llegaron acompañadas por mas lesiones esta vez le toco el turno a Joba Chamberlain con problemas en su brazo de lanzar meteoritos.
Constantes sube y baja en el renglón de ganados y perdidos en el mes de agosto los tiene agonizantes y silenciosante en el tercer puesto con 70 ganados y 61 perdidos a una distancia de 9.5 del primer puesto.
Faltándoles series contra equipos lideres de sus divisiones, 2 series contra los lideres Rays de Tampa, 3 partidos contra los lideres del oeste los Angelitos de Anaheim, 4 partidos contra los Medias Blancas de Chicago más partidos con los equipos de Seattle, Baltimore, Toronto vemos muy reducidas las posibilidades de este equipo.
Los mas de 52 mil fanático como promedio que asistirán a los últimos partidos en el Yankee Stadium se tendrán que aferrar a la celebre y famosa frase de Yogy Berra, “El juego no acaba hasta que cae el out 27” una frase aparentemente tonta, pero con tanto contenido dicha por el famoso receptor en un rato de inspiración.
Indudablemente un final triste para lo que muchos llaman la Catedral del béisbol, que difícil se les hará a los fanáticos abandonar la escena del crimen el próximo 21 de septiembre, ultimo dia de acción en este templo, sabiendo que este año, ellos son los muertos.
Oscar Huete
Faltando alrededor de un mes de actividad en las Grandes Ligas, hay un mal olor entre la calle 161 y la avenida River y no es para menos, los multi millonarios Yankees de New York estan agonizantes y dando sus últimos suspiros en esta temporada 2008.
Septiembre es el ultimo mes de actividad y las cosas no se miran tan fáciles para los dirigidos por Joe Giraldi quien contra viento y marea ha logrado mantenerse en su puesto pese a las constantes críticas de los hijos del jefe el Sr. Hank Steinbrenner y su hermano Harold.
Y es que desde el inicio todo marcho mal, Jorge Posada, el eje central de la columna vertebral de los Mulos de Manhattan fue colocado por primera vez en la lista de lesionados y dos dias mas tarde le harían compañía el señor Alex Rodríguez y el lanzador Phil Hughes, al finalizar el mes de abril el equipo ocupaba el penúltimo lugar con record de 14 ganados y 15 perdidos a tres juegos de distancias del líder los Medias Rojas de Boston.
Las lesiones continuaron en el mes de mayo con el lanzador Ian Kennedy y el jugador de cuadro Wilson Betemit, pese a que a finales del mes A-Rod fue activado, el equipo registraba record de 28 y 27 pero un poco mas largo del primer puesto, a 5.5 juegos de distancia de los nuevos lideres el equipo de los Rays de Tampa.
Con Posada en las listas de incapacitados los fanáticos pensaban que era suficiente pero lo que menos se esperaban, que tres columnas más se derrumbaran en el mes de junio, esta vez les toco al lanzador Chien-Ming Wang quien se lesiono su pie derecho en los juegos inter-ligas, al Japonés Hideki Matsui y al jardinero central Johnny Damon.
Al concluir el mes de junio las aspiraciones fueron positivas con un Joba Chamberlain ganando juegos y abanicando a cualquier bateador que se pusiera enfrente, un José Molina desempeñándose súper bien en el manejo de los lanzadores, mas los regresos de Rodríguez y la incorporación de Posada se logro finalizar con record positivo de 44 y 39 a una distancia de 6.5 partidos del equipo sorpresa Tampa.
Llego el momento del receso por las actividades del juego de las estrellas y todo era algarabía en los terrenos del monumental Yankee Stadium, la ovación de los miles de fanáticos previos al juego a Joe Giraldi llego como un espaldarazo de aliento cuando mas lo necesitaba.
Al cierre del mes de julio aun existía una pequeña luz, que iluminaba el largo trayecto de subir a la cima del Montes Everest, con 59 y 49 se podía coquetear con la idea de avanzar a los play off , pero con lo que nadie contaba era que los muchachos de Tampa no se doblegarían fácilmente.
Llego la época de cambios y los Yankees firmaron a Richie Sexson dejado en libertad por los Marineros de Seattle por su bajo rendimiento, acción que repetirían los Mulos mas adelante, tambien obtuvieron a Xavier Nady y al pitcher Dámaso Marte de los Piratas de Pittsburg por jugadores de liga menor.
Los miles de fanáticos llenaban las graderías con el único propósito de alentar a sus alicaídos Bombarderos del Bronk, pero esto de nada servia fueron sumando derrotas tras derrotas las cuales llegaron acompañadas por mas lesiones esta vez le toco el turno a Joba Chamberlain con problemas en su brazo de lanzar meteoritos.
Constantes sube y baja en el renglón de ganados y perdidos en el mes de agosto los tiene agonizantes y silenciosante en el tercer puesto con 70 ganados y 61 perdidos a una distancia de 9.5 del primer puesto.
Faltándoles series contra equipos lideres de sus divisiones, 2 series contra los lideres Rays de Tampa, 3 partidos contra los lideres del oeste los Angelitos de Anaheim, 4 partidos contra los Medias Blancas de Chicago más partidos con los equipos de Seattle, Baltimore, Toronto vemos muy reducidas las posibilidades de este equipo.
Los mas de 52 mil fanático como promedio que asistirán a los últimos partidos en el Yankee Stadium se tendrán que aferrar a la celebre y famosa frase de Yogy Berra, “El juego no acaba hasta que cae el out 27” una frase aparentemente tonta, pero con tanto contenido dicha por el famoso receptor en un rato de inspiración.
Indudablemente un final triste para lo que muchos llaman la Catedral del béisbol, que difícil se les hará a los fanáticos abandonar la escena del crimen el próximo 21 de septiembre, ultimo dia de acción en este templo, sabiendo que este año, ellos son los muertos.
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