Con más de 74 países reportando casos del virus A (H1N1), la Organización Mundial de la Salud declaró alerta de Pandemia mundial en estos días.
Son más de 32,439 personas afectadas y 166 muertes por esta influenza en la primera enfermedad aparecida en este siglo.
Pero no solo esta enfermedad esta causando pánico. Dentro del béisbol de Grandes Ligas se esta expandiendo rápidamente una que llaman “Desorden” y es que esta tiene varios síntomas: Ansiedad, Depresión, Estrés, Dependencia emocional y muchas otras cosas más.
El caso más reciente de un jugador con problemas mentales es el del torpedero Khalil Greene, quien después de pasar por la lista de lesionados por padecer "ansiedad social", ahora ya se encuentra listo para retornar a sus funciones con el equipo de los Cardenales de San Luis.
Ya se conoce incluso de una lista de varios jugadores que esta siendo afectados emocionalmente por esta rara enfermedad, recuerdo que me hice la pregunta en una nota pasada acerca de Dontrelle Willis, quien se recupera de este mal, ¿Cómo un hombre con tantos millones de dólares puede estar deprimido o ansioso?
Pero lo cierto que este mal esta acechando a los famosos y a los no famosos del béisbol y es que si vemos los motivos, las razones y las causas realmente tienen que enfermarse.
La presión constante a la cual estan sometido estos grandes atletas no se puede medir así de sencillo.
Aquí todo influye los fanáticos, la prensa, los gerentes generales e incluso los mismos compañeros de equipo. Unos salen airoso de este mal sin embargo hay otros que son atacados fuertemente hasta caer en las situaciones de los mencionados.
Tambien existe el caso de lanzador de los Reales del Kansas City Zack Greinke quien sufrió algo similar hace unos años atrás
Greinke no soportaba la compañía de los demás jugadores de su equipo cuando estaban en los vestidores. Años de terapia y esfuerzos dieron sus frutos y hoy podemos ver los resultados en la gran campaña que está teniendo en 2009.
Tambien se dice que Joel Votto de los Rojos de Cincinnati fue colocado en la lista de lesionado a inicios del mes por estar padeciendo de “Stress related issue” algo así como estar cansado de viajar en aviones de primera clase, de hospedarse en los hoteles mas lujosos del mundo con las mejores comidas apetecidas.
A través de los años hemos visto lanzadores salir con toda la furia del mundo del montículo y arremeterla contra los envases plásticos de Gatorade, dándole y dándole hasta no mas poder con un bate, sin embargo este no es un desorden es un momento de locura para mi.
En ese colapso mental vemos a los súper héroes de nuestros hijos mostrar su fea cara con estos comportamientos alocados, muy recientemente el venezolano Carlos Zambrano mostró su enojo de una manera muy singular contra un umpired, expulsándolo del partido, sencillamente porque la jugada decretada por la autoridad no le gusto.
¿Como pudiéramos llamarle a este desorden formado por Zambrano en este partido?
La crisis económica que ha afectado al mundo entero pudiera ser la causante de muchos problemas de desempleos, las cuales traen la consecuencia que la persona se deprima y a la vez padezca de la ansiedad de encontrar un nuevo empleo.
En el caso del jugador su avaricia por lograr contratos millonarios los ha llevado a tomar anabólicos y esteroides para mejorar sus rendimientos y sobresalir sin embargo cuando logran obtener ciertas cantidades de dinero caen en estos desordenes que algunos logran sobrellevar la carga valiéndose del alcohol y las drogas. Triste solución. Otros más afortunados recurren a la ayuda profesional.
Todo este desorden me llevo a investigar si en el pasado han existido otros jugadores afectados por todos estos males y me encontré a varios que han sufrido estos achaques.
Jimmy Piersall
Dentro del mundillo del béisbol talvez el caso más conocido de un jugador con problemas mentales fue el del jardinero de los Medias Rojas Jimmy Piersall quien en 1952 sufrió un desplome nervioso total siendo confinado a un hospital psiquiátrico. Hasta se escribió un libro ("Fear Strikes Out") que luego fue llevado al cine en 1957 con Anthony Perkins ("Psicosis") en el papel protagónico.
Piersall sufrió desde la niñez. Cuando estaba en el segundo curso de la primaria, un día al llegar de la escuela descubrió que su madre ya no estaba. La infeliz mujer había sido llevada hasta el Norwich State Hospital, institución para enfermos mentales, después de "tirársele arriba" a los vehículos.
Su padre, pintor de brocha gorda, metía miedo. "Yo temblaba cuando me hablaba", decía Piersall. El futuro jardinero, comprensiblemente, crecería en una atmósfera cargada de presión, lo que le llevaría a desarrollar una personalidad nerviosa y constantemente preocupada.
Sus dolores de cabeza eran tan fuertes que a veces no podía ni siquiera pararse de la cama o sentarse a ver una película.
Pero sí podía sentarse a ver un partido de béisbol, y lo más importante, jugarlo. Fue así como a los 17 años recibió ofertas de los Yankees, Tigres, Dodgers, Bravos, y Medias Rojas. Firmó con Boston. Lo subieron al equipo grande en la última semana de la campaña de 1950, y con 20 años de edad cañoneó su primer hit en el mismo primer turno en Grandes Ligas.
Boston quería convertirlo en su jardinero central después que Dom Dimaggio se retirara y lo envió de vuelta a las menores a coger experiencia.
Jimmy se quejaba constantemente de la falta de dinero, ya que asumió la responsabilidad de mantener a toda su familia luego de que su padre sufriera un ataque cardíaco.
Antes de iniciarse los entrenamientos de 1952, leyó en The Sporting News que los Medias Rojas pensaban convertirlo en torpedero.
¡Para qué fue eso! Desarrolló una neurosis sobre la idea de que el equipo ya no lo quería. Nadie le podía sacar de la mente tal obsesión.
Comenzó a perder el contacto con la realidad al aparecerse en los campos de entrenamientos sin su guante.
Razonaba que sin el guante nadie lo podía obligar a trabajar. En el lobby del hotel "Sarasota – Terrace" apretaba el botón de pánico cuando la gente lo reconocía. "Me dolían los músculos y mi boca se secaba a la vez que la garganta se me quemaba. Todo mi cuerpo era halado por miles de terminaciones nerviosas incansablemente", relató en su libro.
En agosto, cuando volvió a la realidad despertó amarrado a una cama (sala para enfermos violentos) del hospital Westborough State (Massachussetts).
Por primera vez desde que cumplió los quince años no tenía dolor de cabeza. Jimmy había pasado ocho meses en "otro mundo".
Borró. No recordaba que había jugado 56 partidos con Boston (.267 de promedio), robado tres bases y disparado un jonrón. Aunque externamente se veía normal, mentalmente la situación era otra. Había colapsado.
Afortunadamente se recuperó y pudo completar 17 años de carrera en Grandes Ligas bateando para .272 y haciendo atrapadas de circo.
También protagonizando la conducta típica de un payaso. Casey Stengel lo seleccionó para el Juego de Estrellas del 1954. Al retirarse pasó a narrar para los Medias Blancas de Chicago.
Al encontrarme con todos estos tipos de problemas emocionales a través de la Internet, los cuales han atravesado estos jugadores, me pregunte ¿que tipo de desorden tendrá David Ortiz quien esta siendo seriamente criticado por sus numeros en la ciudad de Boston este año? Y que pasa con Willis que supuestamente ya se había recuperado ¿Será que ha decaído en esta enfermedad o ya vio pasar sus mejores tiempos?
Son más de 32,439 personas afectadas y 166 muertes por esta influenza en la primera enfermedad aparecida en este siglo.
Pero no solo esta enfermedad esta causando pánico. Dentro del béisbol de Grandes Ligas se esta expandiendo rápidamente una que llaman “Desorden” y es que esta tiene varios síntomas: Ansiedad, Depresión, Estrés, Dependencia emocional y muchas otras cosas más.
El caso más reciente de un jugador con problemas mentales es el del torpedero Khalil Greene, quien después de pasar por la lista de lesionados por padecer "ansiedad social", ahora ya se encuentra listo para retornar a sus funciones con el equipo de los Cardenales de San Luis.
Ya se conoce incluso de una lista de varios jugadores que esta siendo afectados emocionalmente por esta rara enfermedad, recuerdo que me hice la pregunta en una nota pasada acerca de Dontrelle Willis, quien se recupera de este mal, ¿Cómo un hombre con tantos millones de dólares puede estar deprimido o ansioso?
Pero lo cierto que este mal esta acechando a los famosos y a los no famosos del béisbol y es que si vemos los motivos, las razones y las causas realmente tienen que enfermarse.
La presión constante a la cual estan sometido estos grandes atletas no se puede medir así de sencillo.
Aquí todo influye los fanáticos, la prensa, los gerentes generales e incluso los mismos compañeros de equipo. Unos salen airoso de este mal sin embargo hay otros que son atacados fuertemente hasta caer en las situaciones de los mencionados.
Tambien existe el caso de lanzador de los Reales del Kansas City Zack Greinke quien sufrió algo similar hace unos años atrás
Greinke no soportaba la compañía de los demás jugadores de su equipo cuando estaban en los vestidores. Años de terapia y esfuerzos dieron sus frutos y hoy podemos ver los resultados en la gran campaña que está teniendo en 2009.
Tambien se dice que Joel Votto de los Rojos de Cincinnati fue colocado en la lista de lesionado a inicios del mes por estar padeciendo de “Stress related issue” algo así como estar cansado de viajar en aviones de primera clase, de hospedarse en los hoteles mas lujosos del mundo con las mejores comidas apetecidas.
A través de los años hemos visto lanzadores salir con toda la furia del mundo del montículo y arremeterla contra los envases plásticos de Gatorade, dándole y dándole hasta no mas poder con un bate, sin embargo este no es un desorden es un momento de locura para mi.
En ese colapso mental vemos a los súper héroes de nuestros hijos mostrar su fea cara con estos comportamientos alocados, muy recientemente el venezolano Carlos Zambrano mostró su enojo de una manera muy singular contra un umpired, expulsándolo del partido, sencillamente porque la jugada decretada por la autoridad no le gusto.
¿Como pudiéramos llamarle a este desorden formado por Zambrano en este partido?
La crisis económica que ha afectado al mundo entero pudiera ser la causante de muchos problemas de desempleos, las cuales traen la consecuencia que la persona se deprima y a la vez padezca de la ansiedad de encontrar un nuevo empleo.
En el caso del jugador su avaricia por lograr contratos millonarios los ha llevado a tomar anabólicos y esteroides para mejorar sus rendimientos y sobresalir sin embargo cuando logran obtener ciertas cantidades de dinero caen en estos desordenes que algunos logran sobrellevar la carga valiéndose del alcohol y las drogas. Triste solución. Otros más afortunados recurren a la ayuda profesional.
Todo este desorden me llevo a investigar si en el pasado han existido otros jugadores afectados por todos estos males y me encontré a varios que han sufrido estos achaques.
Jimmy Piersall
Dentro del mundillo del béisbol talvez el caso más conocido de un jugador con problemas mentales fue el del jardinero de los Medias Rojas Jimmy Piersall quien en 1952 sufrió un desplome nervioso total siendo confinado a un hospital psiquiátrico. Hasta se escribió un libro ("Fear Strikes Out") que luego fue llevado al cine en 1957 con Anthony Perkins ("Psicosis") en el papel protagónico.
Piersall sufrió desde la niñez. Cuando estaba en el segundo curso de la primaria, un día al llegar de la escuela descubrió que su madre ya no estaba. La infeliz mujer había sido llevada hasta el Norwich State Hospital, institución para enfermos mentales, después de "tirársele arriba" a los vehículos.
Su padre, pintor de brocha gorda, metía miedo. "Yo temblaba cuando me hablaba", decía Piersall. El futuro jardinero, comprensiblemente, crecería en una atmósfera cargada de presión, lo que le llevaría a desarrollar una personalidad nerviosa y constantemente preocupada.
Sus dolores de cabeza eran tan fuertes que a veces no podía ni siquiera pararse de la cama o sentarse a ver una película.
Pero sí podía sentarse a ver un partido de béisbol, y lo más importante, jugarlo. Fue así como a los 17 años recibió ofertas de los Yankees, Tigres, Dodgers, Bravos, y Medias Rojas. Firmó con Boston. Lo subieron al equipo grande en la última semana de la campaña de 1950, y con 20 años de edad cañoneó su primer hit en el mismo primer turno en Grandes Ligas.
Boston quería convertirlo en su jardinero central después que Dom Dimaggio se retirara y lo envió de vuelta a las menores a coger experiencia.
Jimmy se quejaba constantemente de la falta de dinero, ya que asumió la responsabilidad de mantener a toda su familia luego de que su padre sufriera un ataque cardíaco.
Antes de iniciarse los entrenamientos de 1952, leyó en The Sporting News que los Medias Rojas pensaban convertirlo en torpedero.
¡Para qué fue eso! Desarrolló una neurosis sobre la idea de que el equipo ya no lo quería. Nadie le podía sacar de la mente tal obsesión.
Comenzó a perder el contacto con la realidad al aparecerse en los campos de entrenamientos sin su guante.
Razonaba que sin el guante nadie lo podía obligar a trabajar. En el lobby del hotel "Sarasota – Terrace" apretaba el botón de pánico cuando la gente lo reconocía. "Me dolían los músculos y mi boca se secaba a la vez que la garganta se me quemaba. Todo mi cuerpo era halado por miles de terminaciones nerviosas incansablemente", relató en su libro.
En agosto, cuando volvió a la realidad despertó amarrado a una cama (sala para enfermos violentos) del hospital Westborough State (Massachussetts).
Por primera vez desde que cumplió los quince años no tenía dolor de cabeza. Jimmy había pasado ocho meses en "otro mundo".
Borró. No recordaba que había jugado 56 partidos con Boston (.267 de promedio), robado tres bases y disparado un jonrón. Aunque externamente se veía normal, mentalmente la situación era otra. Había colapsado.
Afortunadamente se recuperó y pudo completar 17 años de carrera en Grandes Ligas bateando para .272 y haciendo atrapadas de circo.
También protagonizando la conducta típica de un payaso. Casey Stengel lo seleccionó para el Juego de Estrellas del 1954. Al retirarse pasó a narrar para los Medias Blancas de Chicago.
Al encontrarme con todos estos tipos de problemas emocionales a través de la Internet, los cuales han atravesado estos jugadores, me pregunte ¿que tipo de desorden tendrá David Ortiz quien esta siendo seriamente criticado por sus numeros en la ciudad de Boston este año? Y que pasa con Willis que supuestamente ya se había recuperado ¿Será que ha decaído en esta enfermedad o ya vio pasar sus mejores tiempos?
Invitacion
Los invito a Escuchar todos los sábados “Todo Deportes,” en la ciudad de Miami donde comparto con Broderick Zerpa, por WQBA (Univision Radio) de 5 a 7 PM.
Y “Todo Deportes Internacional” a través de :
Radio Deporte 1590 AM en Caracas, Venezuela
Radio Excelente 107.9 FM en Guayana, Radio CuCu 1200 AM en San José, Costa Rica
Radio Espectro en Ciudad Ojeda en el Estado Zulia y en Puerto La Cruz Estado Anzoátegui.
Y tambien en nuestra pagina Web www.tododeportes.us
Y si quieren escribirnos o enviarnos preguntas o enviar saludos
tododepor@gmail.com
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